Y como no era posible de otra manera os traigo la típica torrija.
El modo de proceder es ya conocido:
Calentamos leche con azúcar y un poco de piel de limón y un trocito de canela en rama, luego al enfriarse sumergimos en ella los trozos de pan un poco duro, los dejamos que se empapen bien y los sacamos para que escurran.Con cuidado los pasamos por harina y luego el huevo bien batido y las sumergimos en una sartén con aceite de semillas, las doramos y sacamos a un papel para quitarles el exceso de aceite.
Luego las pasamos por un poco de azúcar y canela en polvo.
Estas las compartí con mi hermano Guillermo que vino a visitarme y como es un muy dulce, le añadí un poco de helado, del que había a mano.
Hasta luego.
Capi.